Me encanta la publicidad, la comunicación y el diseño, pero por estas fechas puedo llegar a detestar la profesión. Por suerte siempre tenemos alguna perlita como ésta que consigue empatizar con nosotros y esbozar una sonrisa en nuestra golpeada cara de "pringaos". Realmente vale la pena escuchar la letra hasta el final.
¡¡FELIZ NAVIDAD!!
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